Preguntamos cuáles son las características diferenciadoras de las empresas que forman el Sector de Artículos para el hogar de la Asociación Nacional de Fabricantes de Aparatos Domésticos (ANFAD) a su actual vicepresidente, el Ing. Octavio Azcoitia, quien consideró que todas las empresas que participan en ese sector reconocen que es fundamental “mejorar la forma de vida del consumidor produciendo con altos estándares de calidad y ofreciendo precios competitivos que sean alcanzables para cada segmento de consumidores”. Por otro lado, indicó que todas las empresas coinciden en la importancia de vigilar el cumplimiento de las normas vigentes y lograr los objetivos “ESG” (Environmental, Social and Governance) referentes al medio ambiente, sustentabilidad, inclusión social y cumplimiento de mejores prácticas de gobierno corporativo.
“Las tres premisas de ESG son un compromiso que llegó hace varios años, pero creo que recién en los dos últimos años es cuando realmente las empresas han empezado a tomar conciencia, no del concepto, sino de la ejecución en la vida diaria”, aseveró.
De los principales productos de su sector, destacó que fundamentalmente es la fabricación de enseres y productos para la cocina, tanto para la preparación como para la cocción y degustación de alimentos.
Entre los utensilios de preparación mencionó como más importantes y emblemáticos a los cuchillos cortadores, peladores, cucharas, palas y tablas para picar. En la familia de productos de cocción a los sartenes, baterías de cocina y desde luego a la icónica y tradicional olla de presión (olla exprés), que sigue siendo muy importante en la vida de las familias mexicanas. En productos para la degustación señaló como relevantes a las vajillas, cubiertos de mesa, contenedores herméticos así como termos y botellas de agua, que se usan para la hidratación de los consumidores.
Al referirse al impacto que provocó la pandemia en su sector, manifestó que fue sorpresivo y disruptivo para todos los sectores tanto en México como a nivel internacional, “pero al paso del tiempo algunos sectores nos vimos temporalmente beneficiados por el programa Quédate en Casa”. Sin embargo, a principios del 2022 con el inicio del regreso a la “normalización” se observó una importante contracción del mercado.
En relación a los inventarios con los que contaba toda la cadena de distribución, explicó que a principios del 2022 las cadenas de autoservicios y departamentales se dieron cuenta que sus inventarios eran correctos respecto al pasado pero eran altos respecto a la nueva demanda, por lo que realizaron los ajustes necesarios, se dio entonces un “freno” en la venta de sus productos durante ese año e incluso el primer trimestre del 2023. “Afortunadamente hoy vemos signos muy alentadores de repunte que nos hace estar sumamente optimistas”.
Agregó que los retos post-pandemia son muy claros sobre todo en el tema de sustentabilidad. Consideró esencial convertir en una realidad la economía circular y continuar impulsando el reciclaje, “debemos motivar a los consumidores a reciclar para que las materias primas vuelvan a incorporarse a la economía productiva y así generar un nuevo producto”.
En el tema de cadenas productivas, Octavio Azcoitia señaló que fue una lección aprendida durante la pandemia en la que “nos dimos cuenta de lo vulnerables que somos”. Resaltó que las cadenas de suministro se han vuelto menos globales y el reto es hacerlas regionales y donde sea posible locales para estar menos expuestos a cambios en los costos y flujos de transportación, recordó que durante la época de la pandemia un contenedor que costaba mil 900 dólares de China a América llegó a costar entre 15 y 18 mil dólares y en ocasiones, aun estando dispuestos a pagar esos altos precios, no se conseguían los contenedores, por eso la importancia de la localización de proveedores para sustituir importaciones y tomar muy en serio el nearshoring.

En cuanto a vigilancia del mercado, destacó que “todos debemos de continuar ayudando a las autoridades a hacer cumplir las normas vigentes y así evitar la competencia desleal de importadores que esquivan el pago de las obligaciones fiscales, ya sea al comprar, importar o vender”.
Reiteró que, desafortunadamente, se siguen encontrando productos en el mercado a precios muy “sospechosos”, en el sentido de que van por debajo de lo que son los costos de producción y la única manera de que esto fuera posible es que “alguien” esté dejando de cumplir con alguna ley, norma o reglamento.
Consideró de gran importancia el seguir insistiendo en la responsabilidad que tenemos todos los consumidores, fabricantes e importadores en el tema de vigilancia de mercado para apoyar a las autoridades con denuncias, al percatarse de que los productos adquiridos no cumplan con la normatividad.
Finalmente, mencionó que después de haber vivido una pandemia, el mayor aprendizaje fue disfrutar nuevamente de la familia y del hogar, ya que el hogar ha sido y será siempre el lugar más seguro y acogedor para las familias mexicanas.